Un paseo por la ciudad adornada de multitud de luces de colores, escaparates decorados con papel brillante de plata y oro, adornos navideños, música de villancicos..., nos recuerdan que la Navidad ha llegado.
Siempre he asociado la Navidad con la felicidad de reencontrarme con los seres queridos, aunque a decir verdad, también me llena de nostalgia el recuerdo de quienes nos dejaron para siempre e intuyo su presencia espiritual en esas comidas familiares, lamento que el móvil no se hubiera inventado antes para poder ojear esas fotos rodeados de mis ancestros en esas entrañables fechas. Afortunadamente, la mesa sigue llenándose, ocupando el lugar vacío de nuestros padres los nietos y nuevos miembros de la familia.
Son muchos los que reniegan de estas fechas por haberse convertido en un delirio comercial, en un consumismo exacerbado, pero incluso eso tampoco lo veo tan negativo ya que el objetivo primordial es regalar a los demás unos momentos especiales con alimentos mas costosos y obsequios que serían un capricho renunciable en otro momento.
A modo de nube de ideas, la Navidad me evoca: Familia, felicidad, generosidad, nostalgia, amor, cariño, ilusión, magia, perdón, reflexión, emociones y paz.
Os deseo de todo corazón que paséis una Feliz Navidad y que en el Nuevo Año 2019 se cumplan todos vuestros deseos, que no nos falte nunca amor, salud y trabajo.