Presentación
Pilar y Sergio son otros veteranos trotamundos que dieron su Vuelta al Mundo en el 2007.
Desde el inicio de nuestro blog, su web plagada de vivencias y buenas fotos, lo recomendábamos en nuestra "Guía para dar la Vuelta al Mundo".
Actualmente, este matrimonio segoviano, sin hijos, residen en Madrid. Pilar trabaja como psicóloga-educadora para el Proyecto Hombre y Sergio como programador para una importante empresa austriaca.
" Somos amantes de los perros- nos dice Sergio - y no podemos dejar pasar uno sin ir a jugar con él".
Básicamente, se dieron las condiciones necesarias para que pudiera cumplirse lo que siempre había sido nuestro sueño. Durante años tuve colgada en la pared de mi habitación una frase de alguna tribu remota que decía: "quien ha visto el mundo no está vacío de contenido". Y allá que nos fuimos, a comprobar que ver mundo es una de las formas más satisfactorias de llenarte de contenido.
- ¿Qué pensaron de vuestra decisión los familiares y amigos? ¿Os costó ahorrar el importe del viaje RTW o encontrasteis una financiación? ¿Os habéis arrepentido alguna vez de este esfuerzo económico ?
Los amigos, más allá de unas cuantas bromas, no se sintieron demasiado perturbados. La familia se lo tomó con bastante deportividad. Supongo que pensaron que estábamos locos y que tirábamos nuestro futuro por la borda, pero no pusieron ninguna traba a nuestra marcha.
Vendimos el coche, el ordenador y la cámara de fotos, pero no llegamos más allá de eso. Por suerte nuestra situación económica en aquella época (qué tiempos aquellos!) nos permitió dar el salto sin necesitar ninguna financiación aparte del dinero que nos llegaba del alquiler de nuestro piso. Ni por asomo nos hemos arrepentido de aquella inversión. Es más, fue una perfecta oportunidad de deshacernos de nuestro coche y ahora nos alegramos de no tener coche un día si y otro también.
La verdad es que no tengo ni idea de cuándo surgió la idea. A lo mejor hacer el Interrail sirvió de semillita. O a lo mejor la primera vez que fuimos a Australia, cuando nos dimos cuenta de que unas vacaciones de un mes eran radicalmente distintas a unas de una semana. Las tres semanas que pasamos pedaleando por Islandia también nos despertaron nuestro apetito aventurero...
La preparación no duró mucho. Decidimos que haríamos el viaje unos 5 meses antes de irnos... durante los cuales dejamos pasar plácidamente el tiempo para que se nos echara encima. Las vacunas nos las pusimos unos 4 meses antes de partir (es lo único que hicimos a tiempo) y la definición precisa del viaje la hicimos aproximadamente un mes antes de partir. De repente nos encontramos en la misma habitación de mi casa donde estudiábamos cuando íbamos a la universidad... pero empollándonos las rutas de OneWorld.
Para resolver las últimas dudas que nos acuciaban poco antes de partir fueron de vital importancia vuestros primeros entrevistados, Ana y Tonesillo.
Por desgracia, el día que íbamos a comprar el billete murió un amigo nuestro. Los ánimos se nos quedaron por los suelos, así que decidimos prescindir de la India, que iba a ser nuestro primer destino y retrasamos un mes la partida.
- ¿Qué idiomas habláis? ¿ Tuvisteis en el transcurso del viaje algún problema de comunicación?
Pilar entiende un poquito el inglés, pero no lo habla. Yo me defiendo más o menos bien en inglés. No tuvimos grandes problemas de comunicación. Quizás el país más difícil fue Japón, donde casi nadie habla inglés. Pero lo suplen con mucha amabilidad, excelente buena educación y muy buena predisposición.
En Birmania (y en general en el Sudeste Asiático) casi nadie habla inglés, pero sí lo hacen las personas que de alguna manera están relacionadas con el turismo (aunque hablan tan mal que a veces sería mejor entenderse por signos...). Con el resto de la gente nos apañábamos con gestos, lo cual creaba situaciones muy divertidas en algunos casos.
También nos costó mucho acostumbrarnos al español de Chile. Había veces que no entendíamos ni una palabra!
La hicimos en compañía, así que quedaría muy mal que te dijera que aconsejo hacerla en solitario :-)
Hay miles de análisis por internet a favor de lo uno y lo otro, y creo que todos son acertados. Pilar y yo estamos muy bien compenetrados, así que para nosotros forma natural de viajar es en pareja. Además, la compañía nos aportó una base muy importante para permanecer equilibrados (dentro de lo posible) en los lugares donde la miseria y las diferencias sociales nos hacían sufrir más de la cuenta. El tener alguien al lado con quien comentar las diferencias culturales y las injusticias sociales aporta un punto de serenidad muy necesario para no acabar desquiciado.
- ¿Cómo llevasteis vuestro equipaje, en mochila, en maleta o hiciste uso de ambos ?
Llevábamos una mochila grande (Pilar una de 60 o 65 litros y yo de 70 litros ampliable a 80). Además, llevábamos otra mochila más pequeña cada uno, para el día a día. En Nueva Zelanda compramos otra mochila de unos 40 litros muy básica y ligera para hacer el treking de Abel Tasman. Y para el treking de las Torres del Paine un amigo que vino a visitarnos nos trajo una mochila más montañera.
Parece ser que no hay muchos modelos de mochilas para hacer este tipo de viajes, así que dejo el enlace a la mía, que me funcionó a las mis maravillas: Deuter Traveller.
La verdad es que no creo que haya prácticamente nada imprescindible. Y casi siempre se puede encontrar todo lo que se necesita.
Para países con malaria es muy importante la mosquitera si se va a pasar por zonas rurales. Un ordenador portátil (sobre todo uno de esos enanos que venden ahora) puede hacer maravillas. Sirve para llamar a casa a través de Skype por la patilla pirateando alguna señal wifi, para ver películas, para leer libros, para ir organizando las fotos si te va mucho la fotografía como a mi...
También un forro polar. Sirve para el frío y como almohada para dormir por la noche (y para combatir el aire acondicionado en los autobuses y aviones).
Hay algo que no llevaría si repitiera el viaje: las botas de montaña. Como calzo un 46, las botas me ocupaban media mochila. Es verdad que para las Torres del Paine, el Cerro Torre, el Aconcagua y los trekings por Nueva Zelanda me vinieron muy bien, pero creo que habría podido salir del paso con las zapatillas bajas de montaña que también llevaba y me habría ahorrado mucho peso y espacio.
La próxima vez que vaya al sudeste asiático me llevaré un montón de postales del Alcázar, el Acueducto y la catedral de Segovia (que es de donde somos) para regalárselas a la gente. Les habrían encantado. Para los que vayan allí directamente desde España, recomendaría llevar toda la ropa posible y regalarla o donarla en el país de destino.
Y recuerda amigo: nunca salgas de casa sin tu navaja Suiza! (con tijeras).
- ¿Cuál fue el itinerario y la duración de vuestra Vuelta al Mundo ? ¿ Fue suficiente, corta o excesiva?
Itinerario: Madrid - Tailandia - Birmania - Tailandia - Camboya - Vietnam - Hong Kong - Japón - Australia - Nueva Zelanda - Polinesia - Isla de Pascua - Chile - Argentina.
Duró un año, y para mi gusto fue EXCESIVAMENTE CORTA. Habríamos continuado durante otro año con sumo gusto. De hecho, intentamos prolongar algún mes nuestro viaje, pero por asuntos ajenos a nosotros , tuvimos que volver justo al cabo del año.
- ¿Sois partidarios de un viaje RTW con vuelos y rutas programadas o mejor improvisar sobre la marcha ?
Si "sólo" dispones de un año (o menos), soy partidario de tener unos cuantos vuelos principales programados. Sobre todo si es la primera experiencia de este tipo. El no llevar ningún vuelo cerrado, implica dedicar mucho esfuerzo y tiempo a buscar vuelos, ofertas, fechas disponibles... y supongo que dominar bastante el inglés para lidiar con las agencias de viajes.
Una de las ventajas del billete OneWorld es que permite cambios de fecha gratuitos, por lo que si tienes más o menos claro el itinerario, siempre puedes mover las fechas en caso de que estés en un lugar donde quieras permanecer más tiempo. Nosotros sólo cambiamos fechas en la Polinesia (porque todo era carísimo y no queríamos fundirnos todo nuestro presupuesto allí) y en la Isla de Pascua (donde nos quedamos sin dinero y en el único banco de la isla no se podía sacar dinero con nuestras tarjetas).
Si repitiera el viaje ahora, a lo mejor sí que me animaría a no llevar nada reservado e ir decidiendo según sople el viento.
Nosotros compramos un billete con la alianza OneWorld y llevamos cerrados los principales destinos (Madrid-Bangkok, Hong Kong-Tokio, Tokio-Perth, Adelaida-Auckland, Auckland-Tahiti, Tahiti-Isla de Pascua, Isla de Pascua-Santiago de Chile) . El resto lo improvisamos sobre la marcha (ida y vuelta a Birmania, Tailandia-Camboya-Vietnam-Hong Kong, las 10 veces que pasamos la frontera entre Chile y Argentina, y todos los viajes dentro de los países).
- ¿Qué lugar del mundo os fascinó ? ¿Os habéis propuesto volver a visitarlo ?
Birmania , por sus gentes, nos pareció un lugar maravilloso. Si tuviéramos que elegir un solo lugar al que volver, sería ese. Si, nos hemos propuesto volver a visitarlo lo antes posible.
Después elegiríamos Japón, por la mezcla entre lo moderno y lo tradicional y el elevadísimo desarrollo social. En cuanto a paisajes, Australia, Nueva Zelanda y Chile. Como lugar exótico al que será difícil que volvamos, la Isla de Pascua. Por la sonrisa contagiosa de la gente, que te llena de buen rollo, Tailandia. Por lo agradable que resulta charlar con la gente, Argentina. Para darse una vuelta en coche, la Tierra del Fuego y el desierto de Atacama .
Si me preguntaras "¿A qué lugar no volverías ?" Yo por mi parte aún no he conocido ningún lugar al que no volvería.
TT y Mauricio, unos brasileños con los que nos moríamos de la risa. Yerko y Cote, que nos trataron como amigos de toda la vida. Carolina y José Antonio, a cuya boda acudimos en la Isla de Pascua y que nos acogieron en su casa cuando no teníamos donde dormir. Luiza, con la que hice una excursión estilo Indiana Jones. Karmen, con la que estuvimos súper a gusto en Birmania. Idóia, Irune, Xabi y Asier, a los que teníamos manía porque nos fastidiaban los atardeceres en Bagan y a los que acabamos cogiendo un gran cariño. Rosana y Jorge, en cuya casa nos presentamos sin previo aviso y nos la cedieron incluso cuando ellos no estaban en ella. Blanca, con quien conectamos especialmente bien porque ya la conocíamos. Elisa y Héctor, que ahora también están dando la vuelta al mundo. Inma y sus dos amigos, con los que nos cruzábamos por todas partes en Vietnam. Claudia y Jessica, con las que nos horrorizábamos por las cucarachas en la Polinesia. Juan y Marga, con los que caminamos por los senderos de las Torres del Paine. Pablo y Ana, y todos los españoles con los que comimos okonomiyaki tras ver triunfar a la selección en Japón. Soledad, la argentina que combatió el aburrimiento de Auckland tomando algo con nosotros a la salida del trabajo. Madri, con quien nunca nos aburrimos. Varias japonesas con nombre suficientemente complicado como para que no pueda citarlo de memoria. Los japoneses que nos invitaron a comer sushi en Kioto, el que nos acompañó en el metro para que no perdiéramos el autobús, la gente que se nos acercaba en San Pedro de Atacama para preguntarnos por la salud de Leíto . En general, TODOS los argentinos y chilenos con los que nos cruzamos, y que invirtieron su tiempo en charlar con nosotros como si fuera lo más importante que tuvieran que hacer en los próximos días.
Y me temo que me dejo a mucha gente en el tintero. Especialmente a todos aquellos que, sin hablar español ni inglés, nos brindaron toda su simpatía y su amabilidad aun sabiendo que jamás nos iban a volver a ver y la mucha gente que nos regaló cosas, o nos hizo descuentos sólo por saber que nuestro presupuesto era ajustado
- ¿Qué comida, alimento o fruta os llamó la atención por lo sabrosa que era o por la repugnancia que te producía?
Por la repugnancia, las cucarachas que comían en Tailandia. No solo nos amargaban la vida por las noches, sino que encima nos las encontrábamos fritas y listas para comer en los mercadillos. También vendían saltamontes y gusanos. El perro y las ratas que vendían en Vietnam también nos dieron mucho repelús.
No es que diera asco, pero el Cancato de Chiloé (Chile) era una bomba de relojería: salmón, chorizo y queso, todo asado en un mismo taco.
Lo que nos encantó: el mango de Birmania, la piña de Tailandia y los lichis de Vietnam. Además, la comida tailandesa en general. Bueno, y la japonesa tampoco se queda corta. En japón son especialmente útiles para elegir comida las reproducciones de plástico de todo el menú que tienen a la entrada de los restaurantes.
15 comentarios:
Es un honor aparecer entrevistados en vuestro blog :-)
Un abrazo
Hola Pilar y Sergio:
El honor es nuestro al poder contar con las vivencias de unos excepcionales y veteranos trotamundos como vosotros.
¡Qué sigáis acumulando aventuras ilustradas con tan magníficas fotos! .
Muy agradecidos por vuestra colaboración, un fuerte abrazo
Que gran viaje y que grandes viajeros.
Saludos
Y además de haberse dado la vuelta al mundo son más salaos que las pesetas!! :) Y me dieron el empujoncito que me hacía falta para intentar emularles! :)
Un viaje fascinante sin duda, cuando viajas entiendes que este pequeño mundo tiene una magia especial.
Abrazos
Una acertada entrevista, como siempre, que pone los dientes largos. Un año viajando !!!, que envidia. Un viaje de una semana o 15 días no es nada al lado de esa experiencia vital. Me queda una duda, ¿como se adapta uno a la vuelta?, todo el mundo cuenta su experiencia durante el viaje, pero el regreso también debería merecer un análisis. Esto no son las típicas vacaciones, en las que vuelves a tu casa y deshaces la maleta.
Los puretas solo podríamos hacerlo si nos toca la primitiva o la lotería dentro de unos días.
Felices Fiestas a todos, en especial a Asún y Ricardo y mucha salud para disfrutar de la vida.
Un abrazo,
Carlos
Gracias M.Eugenia, Ignacio, La Guardiana y Carlos por vuestros comentarios.
Nos unimos a los buenos deseos de Carlos para estas entrañables fechas.
Un abrazo
Amigos Asun y Ricardo,
os agradezco toda la información de vuestra pagina que me sirvió de gran ayuda y ánimo para emprender nuestra Vuelta.
Os mando enlace a nuestro blog: Vuelta al mundo en 50 días que a duras penas vamos actualizando a menudo que avanza nuestro viaje.
Saludos, y gracias nuevamente,
Juan
Hola Juan y Trinidad:
Nos alegra que otros trotamundos hayan encontrado útil nuestra información y les haya servido para cumplir sus sueños.
Es un placer enlazaros para que nuestros seguidores disfruten de vuestra aventura.
Que la añoranza de casa no os impida ser felices en estas entrañables fechas. Feliz Navidad.
Un abrazo
Buenoo buenooo que pedazo de entrevista, en plan profesional y que pedazo de viajeros¡¡¡¡
Toda una clase práctica de lo que hay que hacer y saber para comenzar una aventura como ésta.
Gracias por pasaros por mi blog, que paseis unos buenos días y un año 2010 donde se cumplan vuestras ilusiones y proyectos.
Besos y abrazos.
A salto de mata
Buenas tardes pareja,
os mando un abrazo desde Laos y deseos de buenas fiestas y buen 2010.
Iván
Hola Miguel e Iván:
Os deseamos igualmente que seáis muy felices en estas entrañables fechas.
Un abrazo
Hola:
Sencillamente quiero pediros una dirección donde enviaros un email con mi cuaderno de bitácora del viaje de 22 días de navegación que mi mujer y yo hicimos, en un carguero de contenedores, desde Bremerhaven (Alemania) a Buenos Aires, en diciembre del 2001. Pienso que os puede divertir leerlo, y así compenso un poco lo mucho que me está divirtiendo leer vuestra peripecia. Vale.
Hola Ricardo:
Gracias por querer compartir con nosotros vuestra aventura que seguro que será espléndida. Si quieres hacer público vuestro diario podéis escribirlo en
Diarios de Viajes es muy sencillo hacerlo e incluir fotos y luego os lo podemos enlazar para que también lo puedan disfrutar nuestros seguidores.
Felices Navidades y venturoso año nuevo.
Saludos
Gracias por vuestra visita.
Que tengais una buena Navidad.
Un abrazo
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